Por Penélope G. Fernández colaboradora de Slow Fashion Next.
Foto Imagen Destacada: Stylink
Como vimos en el post anterior, hay varias cosas fundamentales a tener en cuenta antes de ir a visitar el taller o talleres donde quieres comenzar a fabricar tu producción o una línea de tu colección.
Partimos de la base de que somos un pequeño emprendedor slow fashioner 😉 y que ya trabajas en ello, aunque fuera un hobby, pero lo estás perfeccionando para convertirlo en un producto vendible, sin que pierda su valor de objeto artesanal o único y no de masa.
Veremos unos puntos que tenemos que tener claros o preparados antes de vernos con el taller donde pretendemos o simplemente, vamos a pedir presupuesto y asesorarnos. Hablar con una persona que lleva años fabricando textil en pequeña o gran cantidad, ya de mano, te va a ayudar mucho.
Debemos tener claros estos puntos, al menos:
NÚMEROS. Tus costes, -tus cálculos por lo que te compensa coser fuera tu producto-, si no has hecho bien los números no sabes lo que ahorras en tiempo y dinero, y si estás dando este paso hacia delante en tu empresa. Ten en cuenta que para un taller es más beneficio una producción grande y regular que nuestras pequeñas producciones, a mayor cantidad más te bajará el precio.
NECESIDADES. Qué te puede ofertar y qué necesitas, aquí hay muchas variantes, si necesitas patrones o los proporcionas, si necesitas que te corten las piezas, o solo llevarlo todo cortarlo para confeccionar, para que te de precio estimado sobre tu demanda. No nos engañemos, hasta que no comienza a trabajar con tu diseño la mayoría de talleres, no sabe el tiempo que les lleva, la complejidad o no, etc.
Y los talleres miden su facturación sobre todo en tiempo, lo que les lleva sacar X cantidad de tus prendas (ejemplo: número de camisetas x horas de trabajo).
Necesitan que la jornada de trabajo sea rentable (como todos, ¿verdad?), es razonable que, a mayor número de prendas iguales o muy parecidas, aumenten la velocidad, pues no tienen que pararse a mirar el prototipo o la ficha, y si son pocos, pero varios modelos les llevará por el contrario, más tiempo. Esto lo irás viendo perfectamente en el día a día.
Es muy importante qué tipo de producto haces, para saber si tienen la maquinaria adecuada, punto, impermeable, cuero, etc.
Foto: Prototipo Vera Wang
Debes presentar tu ficha técnica o mejor, tu prototipo, con todas las indicaciones, para que no tengan dudas a la hora de confeccionar o tengan las mínimas, aunque pase de mano en mano la información esté clara. Si además de la ficha con las indicaciones de confección y descripción, aportas una muestra física, agilizarás el trabajo y mejorarás los resultados. Está claro que una imagen vale más que mil palabras.
También puedes pedirles que realicen una muestra si tienes un buen boceto y ficha, si tu producto no es complejo, esto ya lo irás viendo, dependiendo de tus necesidades.
Foto: Muestras de Tejidos
Así que tienes que tener muy claro:
EXPECTATIVAS. Lo que esperas del taller: el valor que te puede aportar y ahora no tienes, ya sea en acabados mejorados, en que tu producto tendrá un acabado más industrial y fino, o que al mes tengas más cantidad porque a ti no te daba tiempo a hacer números, diseñar, pensar, pagar y cumplir con tu demanda.
CALIDAD. que siempre estará reñida con el tiempo. Sí, pueden producir más rápido y con una calidad media. Esto ya lo irás viendo con el tiempo, pero mi consejo es que no lo pierdas de vista.
Por ello el tema de las pequeñas producciones: pagar más y con calidad y dar valor a tu producto. ¿Cómo se consigue? Con mucho esfuerzo, cuidando TODO el proceso, todas las partes, porque si te dejas llevar por aumentar la producción sin cuidar tu producto esto te llevará por un camino que al final no te dará satisfacción y nunca será suficiente.
LOCALIZACIÓN. Además de que estás siguiendo la cadena de sostenibilidad, si optas por un taller de cercanía, es mejor para ti pues al principio necesitarás visitarlo más a menudo para ir viendo primero el resultado con respecto al prototipo, y segundo los tiempos.
Piensa también que en todo este proceso tú irás aprendiendo con ellos, sobre costuras, acabados, tiempos, materiales, etc…
A tener en cuenta (fuente propia)
Todo este proceso es complejo y laborioso pero a la vez es un continuo aprendizaje, en este sector además de que la competencia te enseña, la innovación en el sector textil es cada día más rápida y siempre puedes ir añadiendo procesos que mejorarán tu producto.
Espero que te haya servido como pequeña guía para comenzar y no tengas miedo, has de tener en cuenta que todos los días surgirán dudas o percances que siempre te enseñarán a hacerlo mejor la siguiente vez.
“Dibujo de la fábrica textil Marshall’s Mills para el tratamiento del lino, en Holbeck, Leeds, Inglaterra”
Si realmente amas lo que haces verás que es apasionante (y estresante) el trabajo en equipo; hacer una colección es una larga cadena de personas y puntos hasta llegar al resultado final.
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