Con el nombre de Fashion Library, Library Shop o Bibliotecas de Ropa, surge una nueva propuesta creativa apoyada en los valores de sostenibilidad, economía colaborativa y consumo responsable; un nuevo concepto de comercio, que promueve el aspecto de “disfrutarla” en lugar de “desearla” cuando de la vestimenta se trata.
Las bibliotecas de ropa surgen con un concepto claro de préstamo de ropa, de crear comunidad y un nuevo estilo de vida que sirva para contrarrestar los efectos de un consumo masivo. En Amsterdan, Lena, a través de Red Box Innovation, asegura que tiene como objetivo ofrecer en alquiler ropa bonita para cualquier ocasión y que además puede ser comprada cuando el cliente lo desee y todo ello, sin perjudicar el medio ambiente. En Barcelona, recientemente se ha inaugurado la primera biblioteca de ropa, Ropateca, de la mano de dos hermanas alemanas residentes en esta ciudad, que no han dudado en apostar por este modelo de negocio en donde puedes encontrar ropa y bolsos desde 15 € al mes.
En una sociedad que nos recuerda cada día cómo crece y se desarrolla el individualismo a través de nuestro trabajo, con la guinda puesta en las “profesiones liberales”, vemos por otro lado, cómo surgen proyectos que detrás de una gran sensibilidad, demandan la recuperación de los valores perdidos, con distintas acciones y estrategias orientadas a concienciar y compartir.
Aguja e Hilo: puntadas y palabras para crecer.
Nijdeken, un diseñador holandés con alma de visionario, explica su proyecto diciendo que cuando el diseño sirve de agente social, lleva la intención de reparar y construir las relaciones sociales, estimular la iniciativa de las personas, hacer florecer y crecer las estructuras sociales. Persigue encontrar la confianza mutua, la comprensión, la energía positiva, los aspectos vitales para el bienestar de las familias, las organizaciones y las empresas.
Con su proyecto, Crossover Collective, no intenta hacer un producto, lo que intenta es diseñar las condiciones para que suceda una experiencia. Él insiste en que son tiempos de aprendizaje individual, alejados del resto, donde el intercambio social está cada vez más ausente. Con su “máquina” como él la ha llamado, el espectador es una parte activa de la instalación donde se traspasa la técnica y la tradición a través del comportamiento, el conocimiento, la experiencia, las habilidades, las historias, los valores y los sentimientos, creando una atmósfera en la que reúne a los protagonistas en torno a una estructura de madera que lleva ancladas, bobinas de hilo. En ella, sienta a viejas y nuevas generaciones a un intercambio de ricas experiencias, a una convivencia, mientras charlan y tejen un tapete.
Este espíritu lo ha ido mostrando en distintos eventos como el que recoge este vídeo, en la elaboración de un “tapete banderola” durante la semana de la lana en Amsterdam 2013.
Y más recientemente, lo hemos podido ver mostrando su proyecto este año, durante la edición de Fuorisalone 2015 en Milán.
Este proyecto que arrancó en 2013, me hizo reflexionar acerca del momento social que vivimos y he visto poco a poco como esa tendencia ha ido creciendo en los últimos años y se materializa en las nuevas propuestas de diseño y en nuevas estrategias de negocio. Hemos visto a nuestro alrededor como se apuesta cada vez más por espacios de costura, donde además de recibir formación acerca de las técnicas de costura, proponen distintos servicios como el alquiler de máquinas de coser por hora, donde puedes acabar tus trabajos y tener el apoyo técnico para resolver las dudas, participar en los debates y compartir conocimiento. Un espacio que promueve la pausa y la reflexión a través de la creatividad, como las ya conocidas tertulias del patch y la costura, las de aprender a tejer, como la iniciativa de We are knitters, con un desarrollo conceptual muy acertado que conecta y sintoniza con las nuevas generaciones, con mensajes como “Apadrina una oveja y recibe su lana y mucha felicidad”, cada mes una bolsa con ovillos de lana de tu oveja en casa. Puede tener más magia?
La editoriales, muy atentas a la señales de cambio, no dudan en apoyar la divulgación de textos en este sentido. Es frecuente encontrar nuevas ediciones de libros como el de Técnicas de Confección de Moda volumen 1 y 2 y más recientemente, “Las Bases de la Costura” de Noriko Sakaue, que con una visión muy contemporánea , propone patrones de prendas simples con el objetivo de ayudar a renovar el armario y con un mensaje claro en la estrategia de comunicación de este producto, en la que hace un guiño con arquitectos, diseñadores, artistas, … recordándoles que confeccionar prendas nos fuerza a pensar del derecho y del revés, un ejercicio mental de lujo.
Llega una nueva estación en la que apetece disfrutar del relax, reducir la velocidad, pero también es momento de hacer otras cosas, de llevar a cabo todo eso que nos apetece, pero que siempre cuesta hacerles un hueco en el día a día, como el experimentar con la costura y deleitarnos con los pensamientos del revés.
Sumérgete en el mundo de la moda sostenible con Slow Fashion Next. Descubre cómo la creatividad y la conciencia se fusionan para impulsar un cambio positivo en la industria, explorando nuevas formas de vivir y consumir la moda de manera responsable. Únete a nosotros en este viaje hacia un futuro más consciente y comprometido con el medio ambiente.