La alternativa al fast fashion está aquí y se llama ropa ecológica.
Hoy en día oímos hablar de ropa ecológica pero en las últimas décadas, la industria de fast fashion se hizo un hueco en el mundo desarrollado. El fast fashion es una fórmula de consumo acelerado caracterizada por la existencia de producciones en masa, mayoritariamente en países en vías de desarrollo.
Debido a problemas económicos, sociales y medioambientales existentes en estos países, las empresas de moda cada vez apuestan más por procesos sostenibles para fabricar ropa ecológica. Además de preservar el medio ambiente, intentan asegurar unas condiciones de trabajo dignas a lo largo de la cadena de suministro.
Por el equipo Moda Impacto Positivo by Slow Fashion Next.
Significado de ropa ecológica.
La moda ecológica es aquella que se produce considerando el impacto social y ambiental que tiene su desarrollo. La ropa ecológica es aquella cuyos tejidos se obtienen de un cultivo responsable durante el ciclo de vida de los mismos.
Asimismo, debemos tener presente en todo momento que para el desarrollo de la ropa ecológica, los productos que se utilicen no sean tóxicos, que el ciclo de producción sea respetuoso con los terrenos de cultivo y que la mano de obra que se emplea tenga unas condiciones de trabajo dignas.
Es especialmente significativo el compromiso de la moda sostenible con la reducción de las emisiones de carbono ya que la ropa ecológica se produce planificando y minimizando las emisiones de este gas y de otros causantes del efecto invernadero.
La producción de ropa ecológica.
En primer lugar, debemos tener en cuenta en qué ámbitos estamos impactando negativamente produciendo de manera convencional.
En la extracción de la materia, tendremos uso de agua y químicos si no es producción ecológica, y uso intensivo del suelo si estamos trabajando con una materia natural. Finalmente, en la fase de confección tendremos impacto social casi seguro, por las malas condiciones en las que suelen trabajar las trabajadoras textiles.
Con esto en mente, es importante tener en mente la filosofía Cradle to Cradle, que da la vuelta al término sostenibilidad. La sociedad habla de lo negativo que es la industria mientras que Cradle to Cradle deja de hablar de ética y ofrece una visión optimista. Según esta visión, los productos contaminantes no es que sean o no sean éticos; simplemente no están bien diseñados, de la misma manera que los que son respetuosos con el medioambiente simplemente están bien diseñados.
En la naturaleza no existe desperdicio, todo se reutiliza. La economía circular pretende hacer lo mismo, eliminando de esta manera el concepto de desecho ya que todo el desperdicio serán las materias primas o los nutrientes del mañana.
Los diseñadores son reconocidos como los principales agentes del cambio en la transformación hacia una industria de moda sostenible. Ser proactivo en los inicios del diseño y el proceso de manufactura, es esencial para cumplir con objetivos sostenibles.
Para facilitar el cambio hacia una industria de la moda más sostenible, aparecen nuevos conceptos a tener en cuenta, siendo el ecodiseño el concepto más relevante. El ecodiseño se define como un proceso que tiene en cuenta el impacto medioambiental asociado al producto desde las materias primas hasta el final de su vida.
¿Qué tejidos se pueden utilizar?
Aunque las fibras y materias primas no son el único criterio de sostenibilidad que hacen sostenible o no una prenda, es cierto que influye de manera determinante en la sostenibilidad de la misma.
Lo primero que necesitamos saber es que los tejidos se dividen según su origen en 3 clases:
- Naturales (vegetales y animales): Si provienen directamente de una fuente natural y no han sufrido ninguna transformación química.
- Artificiales o biosintéticas: Si provienen de una fuente animal o vegetal y sí han sufrido alguna transformación química.
- Sintéticas: Si provienen del petróleo y además han sufrido una transformación química o polimerización.
Tipos de tejidos.
Cuando se trata de encontrar la tela más ecológica para producir moda ecológica, aún queda mucho camino por recorrer para encontrar la respuesta perfecta. No obstante, contamos con una amplia selección de telas en el radar de la industria de la moda sostenible.
Piel de setas
Utilizada para la creación de accesorios, la piel de seta es una alternativa al cuero que es orgánica, libre de gluten y químicos, apta para veganos que incluso posee propiedades antibacterianas.
Fibra de Kapok
Ha sido considerada por Fashion United como la fibra más sostenible en el mercado a día de hoy.
A pesar de que no puede usarse en su totalidad, cuando se mezcla con algodón orgánico puede ahorrar grandes cantidades de agua en el proceso de producción.
Piñatex
Esta alternativa vegana a la piel ha sido creada mediante hojas de piña y forma una textura perfecta para producir accesorios.
Bambú
El bambú es una planta de rápida regeneración, antibacteriana natural, por lo que no requiere apenas pesticidas a la hora de cultivarlo.
Tampoco necesita máquinas, por lo tanto petróleo para su plantación; aunque se están talando bosques para dedicarlos a plantaciones de bambú y se critica la falta de alimento para los pandas, en general su plantación es bastante sostenible.
Lino
El lino procede de la planta herbácea del mismo nombre, cultivada desde tiempos remotos como el algodón y es la fibra vegetal más extendida y explotada comercialmente en todo el mundo después del algodón.
Aunque también se compone principalmente de celulosa, la diferencia con el algodón, es que en el lino la fibra es extraída del tallo y no del fruto.
La desventaja es que se arruga con demasiada facilidad, por lo que en muchas ocasiones se mezcla con otras fibras sintéticas o se trata con productos químicos, motivo por el que dejaríamos de considerarla un tejido sostenible.
Lyocell o Tencel
El Lyocell o Tencel, su nombre comercial, es una fibra artificial cuya fuente de celulosa es cosechada en las plantaciones de eucalipto de bosques gestionados (FSC).
Es tratada mediante un disolvente no tóxico que es continuamente reciclado, con un ratio de recuperación en torno al 98% en un sistema de circuito cerrado.
Sus características son parecidas a las de las fibras naturales, es suave, absorbente, resistente y lavable a máquina.
Biocouture
El Biocouture está formado a base de levadura, bacterias, y tazas de té verde.
Las fibras comienzan a brotar y dan como resultado hojas húmedas delgadas de celulosa bacteriana que pueden ser moldeados con la forma de la prenda.
Algodón
Dentro de que utilizado de forma masiva puede ser un tejido que consume gran cantidad de recursos, existen iniciativas para paliar de alguna manera estos efectos negativos. Por ejemplo, BCI (Better Cotton Initiative), Cotton Made in Africa o Fairtrade Cotton que ayudan a los agricultores a implementar algunas mejoras a nivel medioambiental mientras sacan rendimiento económico.
Casi siempre, se basan en los principios de la agricultura integrada tomando medidas preventivas. Como cultivos de rotación y selección de variedades resistentes a las plagas, o un uso muy específico de ciertos productos químicos.
Fibras Recicladas
El algodón y la lana son las mejores situadas a nivel de sostenibilidad. Esto es debido a que la materia prima para realizar estas fibras ya existe con lo cual no necesitamos ni recursos naturales para producirlas nuevamente.
En cualquier caso, como bien defiende Patagonia, “la prenda más verde es la que ya existe”.
Reciclaje.
No podíamos terminar este artículo sin hacer referencia al upcycling.
Consiste en el diseño de prendas transformando los subproductos, residuos o materiales en desuso o productos en algo nuevo de mejor calidad y mayor valor.
Los materiales que ya existen ya están ahorrando energía, agua, productos químicos y otros recursos necesarios para hacer nuevos materiales vírgenes.
Y tú, ¿ya tienes ropa ecológica en tu armario? ¿Conocías el concepto de ecodiseño y upcycling?
Aprovechamos para invitarte a visitar nuestro directorio de marcas donde podrás encontrar muchas alternativas al fast fashion, y a partir de octubre, ¡más novedades en el directorio!
Sumérgete en el mundo de la moda sostenible con Slow Fashion Next. Descubre cómo la creatividad y la conciencia se fusionan para impulsar un cambio positivo en la industria, explorando nuevas formas de vivir y consumir la moda de manera responsable. Únete a nosotros en este viaje hacia un futuro más consciente y comprometido con el medio ambiente.