Como he mencionado antes, en esta edición de #DetoxWithDrSlow ¡he tenido la gran oportunidad de hacer una entrevista muy especial!
La Psicóloga conductual, Dra. Mercedes Gutiérrez-Moyano Zimmermann con sede en La Coruña, ha sido muy amable ofreciéndose a contestar las siguientes preguntas relacionadas con nuestros hábitos al comprar.
Estaba muy interesada en incluir el punto de vista de una psicóloga sobre este tema. No sólo para obtener consejos prácticos para cultivar unos hábitos responsables de consumo, sino también con el fin de tener unas explicaciones mas profundas que nos enseñen por qué estamos consumiendo de la manera que lo hacemos. Todos sabemos, que conocer los motivos detrás de nuestro comportamiento es uno de los pasos más importantes hacia el cambio, siendo una oportunidad de aprender más sobre cómo funciona nuestra mente y por lo tanto nosotros mismos.
Espero que esta entrevista os inspire a pensar sobre estas preguntas por vosotros mismos y como siempre me gustaría conocer vuestra opinión al respecto, saber más sobre vuestras propias experiencias y recibir las preguntas o dudas que tengáis. Sea en forma de comentarios abajo o a través de un e-mail a:
consciouslyglam@gmail.com
Para la siguiente columna de Ask Dr. Slow el 25 de mayo.
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Dr. Gutiérrez-Moyano Zimmermann y sus hijas.
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Dr. Gutiérrez-Moyano Zimmermann, parece que nuestro apetito para comprar y poseer más y más es casi insaciable. ¿Se trata de un fenómeno de nuestro tiempo, o tal vez simplemente es un instinto humano? En cualquier caso, ¿cuáles son las razones detrás de esto y cómo podemos controlarlo hacia un consumo sano?
Comprar es un fenómeno realmente reciente, en España. La publicidad de los medios de comunicación, las estrategias de marketing actuales nos incitan a comprar, ya que nos crean necesidades, deseos. Los niños son grandes consumidores, y así en épocas como navidades, aun hay mas anuncios de juguetes, colonias, vinos, coches, etc. que incitan a las compras, tanto para los niños, como para los adultos.
Para poder frenar este consumismo actual excesivo, habría que empezar por educar mejor a nuestros hijos, enseñarles a comprar de una manera adecuada y que los padres trataran de dar ejemplo con sus conductas.
Cada vez hay más iniciativas que cuestionan el ritmo en que consumimos, ¿cree usted que estos contra-movimientos tienen realmente el poder de cambiar nuestros hábitos como consumidores?
No soy tan optimista. Creo que cuando las personas tienen unos hábitos de consumo muy establecidos, es muy complicado modificarlos.
Creo que somos los propios consumidores los que tenemos que concienciarnos de nuestras compras.
Los movimientos anticonsumo, son cada vez más en lugar de movimientos antimarcas, creo que los movimientos anticonsumo, cada vez más extensos y en más países, podrían intentar mejorar nuestros hábitos.
Movimientos, como los Knowcosters, pretenden que el comprador pueda comprar de manera informada, así pretenden tener al consumidor informado, que sepa de dónde viene el producto y cómo se ha hecho.
Este tipo de iniciativas me parece que son muy loables y quizás resulten más eficaces, para que modifiquemos nuestra forma de comprar.
Fundación Knowcosters
Hablando con otras personas, tengo por lo general la impresión de que la mayoría de nosotros somos perfectamente conscientes de la locura que supone el consumismo moderno. Sin embargo, de alguna manera parecemos incapaz de escaparnos de él. ¿Por qué es tan difícil?, ¿y qué nos ayudaría de verdad a romper con ello?
Es difícil porque consumir es imprescindible para nuestra vida actual, es algo que hacemos a diario en el sistema capitalista en el que nos movemos. Estamos rodeados de todo tipo de estímulos que incitan a consumir, ya sea al pasear por la calle, al leer un periódico, al ver la televisión, al conectarnos a internet, etc.
Quizás podría ser de gran ayuda si fuéramos conscientes que tenemos que modificar nuestras pautas de consumo. Podríamos hacer una lista con los deseos o necesidades, no comprar por comprar, ya que no nos vamos a sentir mejor o más animados por hacerlo; marcarnos un límite para los gastos superfluos y no ser tan impulsivos; intentar limitar o prestar menos atención a la publicidad, reciclar más etc.
Del mismo modo, a menudo me sorprende lo poco que muchas personas se preocupan por las condiciones las que se ha producido su ropa. ¿Qué crees que les motivaría a optar por alternativas más éticas y sostenibles en el futuro?
Es muy complicado. Las personas compran moda y nos olvidamos que esos productos están fabricados, muchas de ellos, en países donde los trabajadores trabajan en malas condiciones y con bajos salarios.
Quizás había que enfatizar más dónde y como se fabrican esos productos a través de fotos, publicaciones etc. y así ser más conscientes del tema.
¿Qué fácil/difícil cree usted que es desarrollar una autoestima saludable en la era de los medios sociales con su obsesión por la imagen?. Otra fuente que nos anima constantemente a consumir más para mejorar nuestro aspecto.
La imagen corporal se inicia en la infancia y continua a lo largo de muchos años. En las últimas décadas cada vez la presión cultural hacia la esbeltez y la belleza ha ido incrementando. La publicidad en la televisión o en las revistas nos dice que para triunfar y ser feliz tenemos que tener una determinada apariencia, ser altos, delgados, estar en forma, etc.
No todas las personas se ven afectadas por la presión social, porque hay personas más seguras y con mayor autoestima. Pero si hay personas que pueden tener una autoestima más pesimista porque tienen una imagen corporal negativa. Por ello para el desarrollo de una autoestima más saludable tendríamos que tratar de dar menos importancia a la imagen corporal y dar más relevancia a otros aspectos de las personas, sus valores, sus creencias, sus cualidades, etc. Esta es una tarea complicada y sobre todo en el momento actual ya que ser más alto, más guapo/a no nos da la felicidad.
El “Scrabble” de los logos
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Lamentablemente, para algunas personas comprar se ha convertido en una adicción. ¿Cuáles son las señales que indican un problema más grave?
- Dedican gran parte de su tiempo a ir de compras.
- Ir de tiendas es una manera de manejar sus emociones, así se encuentran bien, estables.
- Son impulsivos, no se paran a pensar la utilidad de las prendas, sino que compran lo que les gusta, lo que les apetece en esos momentos.
- Compran un gran número de prendas de vestir, o compran la misma prenda en diferentes colores, etc.
- Esconden algunas de las prendas a sus personas más próximas, familia, pareja etc.
- Suelen pagar con tarjeta de crédito, así no son tan conscientes del gasto que realizan.
- No son capaces de dejar de comprar, y compran con cualquier excusa, es barato, etc.
- Se sienten culpables cuando compran en exceso, pero no pueden dejar de hacerlo.
Del mismo modo, ¿cómo se puede ayudar a alguien que sospecha tener una adicción a las compras?
En la mayoría de los casos ningún adicto/a suele considerar que tiene una adicción. Cuando un familiar o amigo se da cuenta podría intentar ayudarle a través de:
- limitar el crédito de tarjetas (cantidades pequeñas).
- Procurar a acompañarles en sus salidas.
- Salir a pasear y no ir de tiendas, salir cuando sea estrictamente necesario.
- Entrar en pocas tiendas o muy concretas.
- No detenerse en todos los escaparates y escoger lo que no se compraría
- Revisar los armarios y contar el numero de prendas: numero de pantalones, de camisetas, de zapatos, etc.
Por último, ¿si tuvieras que dar un consejo a nuestros lectores sobre cómo comprar / consumir responsablemente, que les dirías?
- Revisar la ropa de anteriores temporadas.
- Establecer un presupuesto y procurar no excederse más de un 20%.
- Guardar los tickets y contabilizar los gastos.
- Decidir las prendas que nos vendrán bien para combinar con las anteriores.
- Comprar prendas útiles a las que les podemos sacar partido.
- No comprar a primera vista por ser barato o porque esta de moda.
Dra. Mercedes Gutiérrez-Moyano Zimmermann, muchísimas gracias por esta entrevista tan interesante e informativa.
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